14/1/10

Tratamiento dental en el paciente diabético


El dentista muy probablemente, tenga que atender a diabéticos no diagnosticados o con control deficiente de su enfermedad, y también a sujetos que reciben tratamiento eficaz. La práctica odontológica firme incluye la realización de una exploración minuciosa de la boca y también el interrogatorio médico adecuado. Entre los signos premonitorios está el antecedente de sed, hambre o poliuria excesiva, o pérdida o incremento importante de peso en fecha reciente.

En la cavidad bucal signos como xerostomía inexplicada, candidiasis crónica o intensa, ardor en la lengua, caries extensas, abscesos múltiples o recurrentes de tipo periodontal, periodontitis de progresión rápida y retraso en la cicatrización de heridas, pueden obligar a la valoración médica. Sin embargo, a menudo antes de enviar al sujeto a consulta con el médico sería preferible que el dentista emprendiera algunas mediciones de glucosa como investigación inicial.

Es importante recabar información detallada antes de cualquier tratamiento dental en el diabético diagnosticado. Convendría conocer el tipo de diabetes y la edad que comenzó, los medicamentos que recibe y el método de administración, el cumplimiento de las órdenes médicas y la técnica de monitoreo, el antecedente de complicaciones diabéticas, los resultados más recientes de pruebas de laboratorio y el nombre y dirección del médico tratante. Esta información permite al clínico establecer relaciones entre el estado bucal y el sistémico de la persona y saber si se necesita la consulta con un endocrinólogo. Es prudente consultar con el médico que atiende a la persona antes de emprender cualquier tratamiento extenso de la boca. En caso de infección o enfermedad periodontal amplias en la boca del paciente insulinodependiente pudiera ser importante recordarle al endocrinólogo que quizá se requiera disminuir la dosis necesaria de insulina después de eliminación del proceso infeccioso.

Los antibióticos con fin profiláctico se usarán solo en tratamientos periodontales o quirúrgicos de urgencia para llevar al mínimo la posibilidad de infecciones postoperatorias y que sea demasiado lenta la cicatrización. Hay que señalar a los pacientes la importancia de la buena salud bucal y su relación con la evolución de su enfermedad sistémica, y de que la diabetes mal controlada aumente la posibilidad y susceptibilidad a infecciones de la cavidad bucal y destrucción periodontal excesiva.
Es importante imponer a los diabéticos un programa de sostén severo y con recordatorios frecuentes después del tratamiento dental hasta que se haya precisado la susceptibilidad a enfermedades recurrentes de la boca.

Los individuos con las formas no insulinodependientes o dependiente pero con control satisfactorio de su diabetes pueden ser tratados igual que personas no diabéticas en lo que toca a métodos odontológicos comunes. Los procedimientos deben ser breves, atraumáticos y con el menor grado de estrés posible.

Conviene que consuman un desayuno normal antes de la cita con el odontólogo para evitar la hipoglucemia. Son preferibles las citas a primeras horas de la mañana, porque en ese lapso la concentración de corticosteroides endógenos suele ser mayor y el organismo tolera mejor los métodos estresantes.

En el diabético con control adecuado habrá que incluir vasoconstrictores junto con los anestésicos locales para asegurar la anestesia profunda. Sin embargo, es mejor no utilizar cantidades excesivas de adrenalina para que no aumente la glucemia y ello se logra al usar un anestésico local que contenga una concentración no mayor de 1:100.000 de adrenalina, o su equivalente.
Los diabéticos insulinodependientes “inestables muestran fluctuaciones extraordinarias en su glucemia. Tales personas y los que no cumplen con las recomendaciones médicas o cuyo control es inadecuado. La hospitalización es la elección, tiene la ventaja de la vigilancia médica estricta y la capacidad de ajustar con cuidado la cantidad de insulina, según se necesiten antes de métodos odontológicos, durante ellos, y una vez realizados.

En casi todos los casos, el tratamiento odontológico de urgencia debe ser paliativo en individuos con control deficiente de su diabetes, hasta que se hayan recibido y llevado a la práctica las recomendaciones del médico.

A veces se recetan los glucocorticoides en odontología, para controlar la hinchazón postquirúrgica, pero es mejor no utilizarlos en diabéticos, para evitar incrementos indeseables en la glucemia.

Los diabéticos con xerostomía no deben fumar ni consumir alcohol, y no utilizar enjuagues bucales con elevado contenido alcohólico. A veces se necesita saliva artificial o sustitutivos de este líquido, en tanto que la candidiasis puede tratarse por medio de antimicóticos locales como la nistatina y el clotrimazol.

Carillas estéticas: cuando usarlas


Las carillas son restauraciones que cubren toda la cara frontal del diente, generalmente empleadas en el sector anterior, cuya finalidad es casi siempre la estética.

Indicaciones:

Esta indicado en los siguientes casos:

1.- Para ocultar restauraciones defectuosas o con alteraciones de color.
2.-para el cierre de diastema (separación de dientes), ya sean únicos entre los incisivos o múltiples.
3.-En el caso de fractura de los incisivos, cuando son múltiples o cuando pretendemos corregir algún tipo de mal posición.
4.-En procesos destructivos del esmalte, como las erosiones químicas de los vomitadores, o de los comedores de limón.
5.-Para ocultar coloraciones patológicas como el esmalte moteado por una fluorosis, o en una tinción por tetraciclinas.
6.-Para corregir sin ortodoncia pequeñas mal posiciones dentarias, apiñamientos o rotaciones de los dientes de la zona anterior (incisivos o caninos).
7.- En exposiciones radiculares generalizadas.
8.- Malformaciones dentarias congénitas o adquiridos.
9.- Para crear guías anteriores ya sea en los incisivos o caninos , de esta forma se recupera la pérdida por un desgaste.

Resumiendo:

-Anomalías de color.
-Anomalías de la forma.
-Textura superficial anormal.
-Problemas alineamiento dental.
-Cierre de diastemas.
-Para establecer guía anterior (función canina o guía anterior parcial)

Contraindicaciones:

-Cuando el esmalte es insuficiente ya que entonces la adhesión de la carilla se verá comprometida.
-Si existen hábitos nocivos como el caso de los bruxómanos, de la onicofagia, de los mordedores de lápices, si se cortan hilos habitualmente, etc. En todos estos casos las carillas están sometidas a estrés excesivo y pueden fracturarse.

12/1/10

La Gingivitis


La infección de las encías, o gingivitis infecciosa, se debe generalmente a un mal cepillado de los dientes. Producto de esto, se acumulan la placa bacteriana y el sarro, fuente de numerosas bacterias. Las toxinas que estas producen irritan la encía y la infectan.

Síntomas

La gingivitis se manifiesta por una hinchazón anormal de las encías, las que se vuelven rojas y sensibles y sangran con facilidad, principalmente durante el cepillado.

Complicaciones

Si no se trata, la gingivitis puede transformarse en una inflamación de los tejidos que soportan el diente (periodontitis), el hueso en el que está implantado el diente se deteriora poco a poco, y los dientes se descalzan. Cuando el hueso está completamente destruido, se habla de periodontitis, afección que se acompaña de un desprendimiento de la encía alrededor del diente. La Periodontitis es la principal causa de pérdida de dientes a partir de los 30 años.

Tratamiento

Consiste en eliminar el sarro en forma meticulosa, eventualmente después de la administración de antibióticos. En el caso de la periodontitis, puede ser necesaria la incisión y ablación de una parte de la encía que rodea el diente (gingivectomía). En caso de periodontólisis, se realiza una intervención que consiste en despegar quirúrgicamente la encía para limpiar y raspar las lesiones (intervención llamada colgajo abierto). El tratamiento también consiste en rellenar las estructuras destruídas con coral u otros materiales. La prevención de la infección de las encías es primordial, por lo que hay que cepillarse cuidadosamente los dientes, al menos dos veces al día, con un cepillo adecuado.

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5/1/10

El Absceso Dental

Es una infección no tratada de la pulpa, tejido formado por nervios y vasos sanguíneos, ubicado al interior del diente. Una vez que la pulpa está destruida, la infección llega hasta el hueso. Generalmente, esta infección es producto de una caries, con menor frecuencia de una fractura dental o de una enfermedad de las encías.

Síntomas:

El absceso dental se traduce en un enrojecimiento e hinchazón característica de la encía y a veces de la mejilla, y en un dolor lancinante que impide masticar normalmente. Cuando no se aplica un tratamiento, el enfermo padece dolores de cabeza, fiebre y un cansancio generalizado. Si la pared del absceso se rompe espontáneamente, se escurre un pus verdoso y fétido y el dolor disminuye en la mayoría de casos.

Tratamiento:


Consiste en drenar el pus, si esto no ha ocurrido naturalmente, mediante una incisión horizontal con bisturí, y luego en sanear los canales que contienen la pulpa infectada. Una vez que se detiene la infección, se obturan los canales con una pasta adecuada, y luego se recubre el diente con una corona, porque se ha vuelto frágil y corre el riesgo de fracturarse. Cuando la incisión no es posible (absceso donde todavía no se ha acumulado pus), se prescriben antibióticos. La prevención consiste en visitar regularmente al dentista para detectar una infección dental en sus inicios, caries o una lesión en la encía. De esta manera es posible intervenir a tiempo.

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3/1/10

Primera vacuna para tratar enfermedad de las encías


Científicos de la Universidad de Melbourne, Australia, han anunciado haber desarrollado una vacuna para el tratamiento de enfermedad de las encías. El programa que tomó 10 años en el desarrollo, implica combatir péptidos bacteriales y proteínas que provocan la respuesta inmune a la inflamación periodontal. La vacuna es actualmente usada en ratones y esperan ir progresando en los ensayos clínicos prontamente, dijeron los investigadores.

Esta nueva vacuna apunta a combatir un grupo de bacterias patógenas llamada P. gingivalis, esta es la mayor causante de periodontitis. Según el consorcio de investigación, basado en estudios hechos en EEUU, los niveles elevados de estos organismos fueron encontrados en la mayoría de lesiones periodontales, así como en niveles bajos con sitios sanos. Además, el organismo también produce un número de enzimas que actúan degradando las proteínas del anfitrión.
Aunque la bacteria pueda ser eliminada por la terapia periodontal, a menudo es encontrado en infecciones recurrentes.

" La Periodontitis es una enfermedad seria y los dentistas afrontan un desafío principal en el tratamiento, porque la mayoría de las personas no saben que ellos tienen la enfermedad hasta que es demasiado tarde y la infección ha progresado a etapas avanzadas, " dice el Profesor Eric Reynolds, presidente del Centro de Investigación Cooperativo de la Ciencia de Salud Oral y el Jefe de la Universidad de la Escuela Dental de Melbourne. " Este nuevo acercamiento proveerá a los dentistas y pacientes un tratamiento específico".

La terapia periodontal tradicional implica el uso de instrumentos manuales y de limpieza, y aún la cirugía con laser hace un esfuerzo para contener la infección bacterial. Reynold dijo que esta nueva línea de productos de vacuna posiblemente prevendrá la progresión de la enfermedad, más bien que manejar sus síntomas y consecuencias perjudiciales. (Dental tribune)

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Fresas inteligentes evitarán dañar la dentina sana

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